LOS RIESGOS DE LA CONDUCCIÓN (2)

Una nueva entrega de esta serie. Ahora hablemos de camioneros, que no conducen precisamente un monopatín. Vaya por delante que la gran mayoría de ellos son respetuosos y que también hay muchos conductores de coche que son unos impresentables. Pero hemos de tener en cuenta el tamaño del vehículo que conducen y las consecuencias gravísimas que puede tener un accidente.

Hace ya tiempo recuerdo que conducía por una carretera en obras, en la que el carril que permitían usar era más pequeño que el normal y limitado no por líneas sino por bloques de hormigón. La velocidad estaba limitada lógicamente y consideré más que oportuno respetar el límite de velocidad establecido. Detrás de mí iba un camionero alemán (sí, ellos tampoco son perfectos precisamente). Al llegar a un stop me comenzó a dar las luces, pitarme y echarse encima de mí; me vi obligado a saltarme el stop; tras este stop, se entraba en una autovía; nada más entrar me adelantó pitando como un poseso y me quedé atrás a pesar de circular al límite de 120 km/h. No pude llamar a la policía pues no tenía manos libres, pero es uno de los días que más estrés he pasado conduciendo.

Hace unos días, un camión se saltó descaradamente un stop y estuvo a punto de arrollar al vehículo que circulaba por el carril contrario al mío; entró en el carril que a veces hay de incorporación y que te obliga a ceder el paso a los que ya van por su carril; por suerte, tras ver el stop que hizo, me olí la tostada y frené, porque efectivamente tampoco me respetó y a punto estuvo de arrollarme a mí también.

Ayer iba yo por una autovía que tiene límite de velocidad en 100 km/h. Iba al máximo que me permitía la carretera, pero de repente vi por el retrovisor un camión cambiándose continuamente de carril, como si fuera una moto y que cada vez estaba más cerca de mí. En la rotonda que había poco después me vi forzado a frenar y meterme casi dentro de la isleta central para que él pasara y no me aplastara.

Señores, sólo pido un poco de sentido común, que son miles de quilos los que conducen y las consecuencias de un accidente pueden ser terribles, sobre todo para los demás.

«El mejor automovilista es aquel que conduce con imaginación… imagina que su familia va con él en el auto» (Henry Ford).

Los comentarios están cerrados.